lunes, agosto 19, 2013

Ofrenda



Por tu infinita misericordia Señor aquí te ofrezco mi pene
Para que lo cuides, lo idolatres
En mi nombre, en el de Borges, en el de Francisco
En nombre del padre, del hijo
Y de este, nuestro único espíritu santo.
Devuélvemelo si es que sigo vivo después de ti
Sano, salvo y erecto
Tal como te lo he entregado
Que hemos con nuestros penes desecho lechos
Templos
Temblores de mar
Y mucha poesía cruel.
Es mi última voluntad
Y es mi último deseo
No teniendo nada más para declarar
Y con mis facultades en perfecta armonía con el universo
Te digo: amén